Los fantasmas de las navidades pasadas y futuras
Por Formación Escopeta:
Vamos a hacer un pequeño ejercicio: estamos en el 24 de Diciembre de 2019. Los Miami Dolphins ganaron su cuarto partido del año, un encuentro que se fue a tiempo extra con los Cincinnati Bengals, y se colocaron 4-11 en la temporada. Esto fue un error, dicen muchos aficionados al equipo, ya que echó por tierra cualquier esperanza que quedaba de tener la primera selección global del Draft 2020.
Vamos, todo se vino al suelo cuando el equipo ganó su primer partido de la temporada, aquella victoria de 26-18 sobre los Jets en la semana 8. Y peor aún: una semana después volvieron a ganar, ahora 16-12 ante los Colts. ¿Qué estaban pensando los Miami Dolphins? Con 2-7 las posibilidades de tener la primera selección y tomar a Tua Tagovailoa, la eminente primera selección global, se iban por la cañería. Con 4-11 todo es todavía peor. Los Bengals
aseguraron esa primera selección al estar 1-14. Los Redskins están 3-12, así que las cosas se siguen complicando.
Todo está perdido, pensaban los aficionados de los Dolphins ese día. Todo el sufrimiento del 2019 no iba a servir de nada si, encima de tantas derrotas, no se lograba seleccionar a Tua.
La realidad, vista un año después, es que estaba pasando todo lo contrario. Los Dolphins no estaban echando por tierra las cosas. Estaban poniendo las bases para lo que sería un 2020 muy, muy distinto. Por casualidades del destino (y una desafortunada lesión), Tua terminó en Miami después de todo. Un equipo de Miami que cerró la temporada 2019 venciendo a los Patriots 27-24 y los mandaron a la ronda de comodines en lugar de darles la semana de descanso. Unos Dolphins que, sin saberlo, pusieron la mesa para el último partido de Tom Brady en New England una semana después. Unos Dolphins que ganaron tres de sus últimos cinco partidos y cinco de los últimos nueve. Ese mismo equipo que ahora está 14-9 desde aquella “desafortunada” victoria sobre los Jets que acabó con la idea del 0-16 para el ‘tanking perfecto’.
Lo que pasó en el cierre del año pasado fue la base para el equipo que vemos ahora. Un equipo que aprendió de la adversidad y que ahora ha vivido con ella, solo que ya no pensando en tomar al siguiente gran prospecto en el offseason. La adversidad ahora es tratar de mantenerse en zona de playoffs, y aunque las cosas están complicadas y probablemente tengan que irse a la última semana a pelear por su vida ante los Bills, todo esto es una señal de
que Brian Flores ha hecho un gran trabajo con este equipo.
Ese 2019, el “fantasma de la navidad pasada”, permitió que el presente de los Dolphins sea mucho más prometedor. Pasen o no a postemporada, este equipo ha sido uno de los que más ha crecido este año. Estos Dolphins lucen como un equipo compacto que pelea todos los juegos, que no tiene miedo a ponerse frente a cualquier rival (sus derrotas antes Bills y Chiefs, los dos mejores equipos de la AFC en este momento, han sido por un combinado de 9 puntos) y que está listo para dar algunas sorpresas (no olvidemos que tienen marca de 3-1 contra la NFC Oeste, probablemente la mejor división de la NFL este año).
Y ese es el “fantasma de la navidad futura”. Los Dolphins necesitan arreglar algunas cosas, como todos los equipos, pero este 2020 ha sido un paso gigantesco en el progreso de la franquicia. Da la impresión de que el futuro es muy interesante para este equipo, y cuando llegue el momento en que la pelea no sea por mantenerse con vida en la carrera por los playoffs sino por decidir su lugar en la siembra, entonces muchos no recordarán que todo comenzó con un año muy malo en 2019. Ojalá lo recuerden, porque entonces se darán cuenta de que no, nada de lo que ha pasado en Miami desde que llegó Brian Flores ha sido en vano.
Espero que todos tengan una excelente Navidad y que el 2021 sea un año lleno de éxitos para ustedes y los Miami Dolphins.
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