Zach Sieler uno de los dos tacles defensivos estrellas de los Miami Dolphins que se encuentran en el último año de contrato, llegó este domingo a un acuerdo por 3 años y 38 Millones de dolares con 20 garantizados, el primero en informarlo fue Adam Schefter. En el contrato miami solo impacta en 2.5 Millones por este 2023 dejando espacio para maniobrar algunos movimientos mas previos a la temporada.
Sieler tuvo su mejor año en 2022 con 12 golpes a los QBs y múltiples tacleadas para pérdida de yardaje. El oriundo de Ferris State fue originalmente tomado en la 7a ronda del draft por los Ravens en 2018 y fue cortado en 2019 en el que Grier lo rescató en los waivers.
La opinón de Marcos Sacal (@draftmisterio).
Me atrevería a decir que Sieler es uno de los jugadores más infravalorados de toda la NFL. No es un nombre que muchos aficionados fuera de los aficionados de los Delfines conozcan, pero eso no tiene nada que ver con el impacto que tiene en el campo. Sieler, que ya tiene en el equipo desde el 2019 es un jugador disruptivo que te genera presiones al QB, al igual que solvencia en la parte terrestre.
Justamente vimos en el último partido de pretemporada en contra de los Jaguares, la importancia de Sieler en el campo, ya que no participó y le corrieron lo que quisieron a una línea defensiva de Miami que tampoco contó con Christian Wilkins.
Hablando de Christian Wilkins está contratación es posible que complique un poco más su extensión, ya que el equipo tiene alrededor de $150 millones de dólares adjudicados en contratos de jugadores a 2026 (no todo garantizado) sin embargo Miami pudiera ponerle en Frachise Tag la siguiente temporada y contar con el un año más.
En términos generales me parece una muy buena extensión a un precio justo para las dos partes.
La opinión de Christian Carrillo (@chriscce).
Es un movimiento muy inteligente, porque Sieler esta en vías de convertirse en un tacle élite y su contrato esta muy lejos de serlo, es muy joven y es un gran jugador en las 3 dimensiones en defensa por tierra, presionando al QB y contrabloqueando para mover la línea de golpeo.